Ayudante de Satanaz

JOB 18.1 Y 2

Respondió Bildad suhita, y dijo: ¿Cuándo pondréis fin a las palabras? Entended, y después hablemos.

Bildad era el mas amargado, hostil y grosero de todos los “Amigos” de Job, ninguno de los otros tenian un discurso mas insolente y provocativo que el, su discurso estaba lleno de fiereza , amenazas y denunciacion contra los pecadores, implicando por supuesto en su denunciacion a Job, no incluía en su discurso exhortación o promesa de restauración, era puro fuego.
Bildad arroja sus palabras amargas sobre Job , sin percatarse que lejos de ayudar, estaba hundiendo mas a Job en el desaliento y la desesperación, al obrar así, servia como bien dice el comentarista Mateo Henry a los designios de Satanás, estaba añadiendo aflicción a las que ya tenia Job.
En este discurso esta acusando a Job primero de locuacidad y charlatanería Verso 2 segundo lo acusa por orgullo y desacato, Verso 3, tercero lo acusa por su pasión Verso 4, lo acusa por su vanidad Verso 4. Bildad no se da cuenta que precisamente de lo que el acusaba a Job era de lo que el adolecía, bien dicen los psicólogos que las faltas que nosotros criticamos en otros y los defectos o errores que no nos gustan de las demás personas, son precisamente defectos que nosotros tenemos que vemos reflejados en los demás y que no nos gustan.
Hay algo que no se nos puede escapar, los amigos de Job vinieron para consolarlo cuando supieron de su desgracia, pero ninguno logro ese objetivo, porque para ayudar no todo el mundo cualifica, antes que mucho conocimiento se necesita buen temperamento, una parte imprescindible de la sabiduría es gobernar el temperamento, y Santiago dijo que la verdadera sabiduría es pura y mansa, nosotros los cristianos estamos llamados a ayudar al débil, solo que tenemos que saber como ayudar. Galatas 6: 1, “Si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre”