Subió destruidor contra ti; guarda la fortaleza, vigila el camino, cíñete los lomos, refuerza mucho tu poder. Porque Jehová restaurará la gloria de Jacob como la gloria de Israel; porque saqueadores los saquearon, y estropearon sus mugrones.
El capitulo dos de Nahum profetiza el derrocamiento de la ciudad de Nínive y el imperio Asirio, con cien años de anterioridad, es un cuadro vívido de la invasión de la ciudad y su caída final.
Dios había escogido a Asiria para disciplinar a su pueblo por su pecado, pero se habían excedido. Muchas veces la providencia divina emplea a naciones e individuos pecadores para disciplinar sus hijos. Los Asirios habían hecho el castigo mas terrible, habían oprimido al pueblo de Dios, habían abusado de su poder en el castigo de Israel, habían aplastado al pueblo de Dios y sus viñas, ahora los saqueadores debían ser saqueados .Todos los que castigan sin medida a otros, también serán castigados sin medida: “Porque juicio sin misericordia se hará con aquel que no hiciere misericordia; y la misericordia triunfa sobre el juicio.”Santiago 2:13.
El poder que se utiliza para abusar, trae maldición sobre el opresor, el poder produce tentación y entonces la persona, deja de lado el honor, el deber social y los derechos, creando abuso, confusión, y lágrimas. Pero Dios no abandona a sus hijos, solo los disciplina.
Dios había escogido a Babilonia, para castigar a Asiria por sus excesos. La llama, el destructor, con ese nombre estaba dando una caracterización de como seria el imperio Babilónico y sus ejércitos. A Demetrio el Sirio, se le llamo, Poliorcetes “destructor de ciudades”, A Atilas se le llamo:”el látigo divino del mundo” A Julio Cesar se le llamo: “El trueno” pues conquisto ciudades y aprisiono a pueblos, A Babilonia Dios la llamo: “La vara de mi ira” pues era el instrumento escogido por Dios, para dirigir la historia humana, en este pasaje se ve la mano de Dios dirigiendo los hilos de la historia de las naciones.
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