Nehemías 3
Se levantó el sumo sacerdote Eliasib con sus hermanos los sacerdotes, y edificaron la puerta de las Ovejas. Ellos la dedicaron y colocaron sus puertas. Dedicaron la muralla hasta la torre de la Centena y hasta la torre de Hananeel. 2 A su lado edificaron los hombres de Jericó, y a su lado edificó Zacur hijo de Imri. 3 Los hijos de Senaa edificaron la puerta del Pescado. Le pusieron sus vigas y colocaron sus puertas, con sus cerraduras y sus cerrojos. 4 A su lado restauró Meremot hijo de Urías, hijo de Cos. A su lado restauró Mesulam hijo de Berequías, hijo de Mesezabeel. A su lado restauró Sadoc hijo de Baaná.
El capitulo tres de Nehemías registra el nombre de todos los que tomaron parte en la obra de restauración de la muralla. Sus nombres quedaron canonizados porque hicieron una buena obra para el reino de Dios, las obras santas que hacemos, aunque quizás no queden escritas ni registrada en un libro, si quedan destacadas en muchos corazones, y vencen las arenas del tiempo.
Emerson tenia un dicho que encierra una grande verdad: “La tarea de cada hombre es su salvavidas”.Esto es una verdad especialmente con referencia al cristiano. Cristo dijo: El que pierde su vida por causa de mi, la salvara”.
Hoy como en tiempos de Nehemías estamos enfrascados en una tarea gigante. “Restaurar el reino de los cielos en la tierra”. Hay necesidad de trabajo, los muros de Jericó cayeron por la fe, pero los muros de Jerusalem no iban a ser construidos solo por fe, según Santiago la fe sin obra es muerta. En este trabajo de restauración del reino de Dios en la tierra, hay trabajo para todos, es un trabajo que no puede hacer uno solo, ni el pastor, ni el evangelista, ni el apóstol, todos al igual que en la restauración de la muralla, tienen que estar involucrados. Es una obra voluntaria, note que ellos dijeron : “Levantémonos y edifiquemos” (Neh 2:18), la obra de Dios solo la pueden construir eficazmente, los que tienen un espíritu voluntarioso, porque debe ser un trabajo unido, solo los que se ofrecen voluntariamente tienen disposición de trabajar unidos. El trabajo de construir las murallas tuvo éxito, nuestro trabajo para el señor también tendrá éxito, cuando nos demos cuenta de estos simples principios que hemos incluido.
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