Confesion de Cristo Romanos 10:9-10

Romanos 10:9-10

Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

Nadie como el Rabino Maimónides, pudo definir lo que era la confesión y el arrepentimiento .La voz hebrea teshuvá (arrepentimiento como se traduce generalmente) es un proceso dinámico, que el rabino lo describió en siete pasos:

1. Confesarse y confesar al Eterno, en palabras, sus errores (cap 1. halajot 1 y 2)

2. Solicitar el perdón al afectado por nuestra errada conducta, sea un individuo, grupo o Dios (cap 1. halajá 3)

3.El pedir perdón no es suficiente, también es imprescindible la reparación, lo que el prójimo que fuera afectado considere que tal deba ser (cap 2. halajá 9)

4.Decidir con empeño no retornar a las conductas erróneas de las que deseamos arrepentirnos (cap 2. halajá 2)

5.Sinceridad e integridad en el deseo y acción de teshuvá (cap 2. halajá 3)

6. Apartarse lo más posible de lo que induce a cometer el error del cual se arrepiente (cap 2. halajá 4)

7. Cualquier momento es el indicado para la teshuvá, (cap 2. halajot.

¿Que es confesar a Cristo? La sola pregunta pareciera necia, para nosotros es un concepto tan predicado, que pareciera que lo conocemos a la perfección, pero cuando nos preguntan no sabemos la respuesta adecuada. Confesar a Cristo es aceptarlo, pues no existe confesión separada de la firme decisión de seguir su ejemplo y enseñanzas. Toda confesión que no se materialice en la vida real, es un simple credo muerto, no es fe viva, sino fanatismo muerto. Confesar a Cristo es aceptarlo como nuestro salvador, creer que es el hijo de Dios, quien murió para que a través de él tengamos vida eterna. Es ante los hombres que tenemos que confesarlo: “A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos. (Mateo 10:32)”.Confesar a Cristo, es confesarlo ante buenos hombres, para que nuestra fe pueda mutuamente ser fortalecida, confesarlo ante los malos hombres, para que su incredulidad sea puesta en evidencia y vergüenza. El cristiano debe declarar públicamente su fe en Cristo, hay muchos que están dispuestos a creer en Cristo, pero nunca se atreven a decirlo públicamente, y mucho menos comprometerse con ninguna rama o denominación de la iglesia de Dios en la tierra. Ahora, el reto mayor del cristiano es confesar a Cristo con sus labios en la vida privada, cuando vive junto con otras personas .A muchos cristianos nunca se les oye una palabra de amor por Cristo. Y sus vidas no son una confesión. “Un buen arrepentimiento es la mejor medicina que tiene las enfermedades del alma” Miguel de Cervantes Saavedra